Después de las operaciones o lesiones de rodilla es importante seguir un buen tratamiento de rehabilitación. En la zona de la rodilla se unen articulaciones, músculos y ligamentos esenciales para una correcta movilidad.
Los problemas que han causado el problema de la rodilla pueden ser de distinto origen y dependiendo de ellos y del grado de la lesión habrá que seguir un programa más suave o más intenso. En cualquier caso la constancia para seguir los programas es fundamental, porque de no seguirlos la recuperación además de ser más lenta se pueden producir dolencias o lesiones al no estar la rodilla plenamente recuperada.
Teniendo siempre en cuenta las características de casa caso, algunos de los ejercicios que se pueden realizar para mejorar las condiciones físicas de la rodilla son:
- Sentado en el suelo con la espalda recta estirar las piernas con las rodillas rectas. Colocar un cojín debajo de una rodilla y tensar la pierna tratando de colocar la punta del pie hacia su cara. Aguantar en esta posición unos segundos y relajar. Repetir el ejercicio 5 veces con cada rodilla.
- Tumbado sobre una colchoneta elevar una pierna con la rodilla recta unos 15 centímetros. Aguantar en esta posición unos segundos y relajar. Repetir el ejercicio 5 veces con cada rodilla.
- Tumbado en el suelo sobre una colchoneta pasar por la planta del pie una cinta elástica que tensamos con las manos. Después, con la pierna recta y la rodilla estirada, ir levantado la pierna hasta lo más alto posible. Llegados a ese punto aguantar unos segundos y bajar lentamente la pierna.
- De pie y con la espalda recta colocar la pierna estirada y con la rodilla recta sobre una superficie que nos permita hacer un ángulo aproximado de 90º con las piernas. En esta posición inclinar el tranco hacia adelante, manteniendo la pierna recta.
Colegiado nº 3.147
Fisioterapeuta y licenciado en Ciencias de la Actividad Física y el Deporte por la Universidad Europea de Madrid.
Vicedecano del Colegio de fisioterapeutas de la Comunidad de Madrid.