¿Cómo se define un latigazo cervical?

El latigazo cervical es un mecanismo de transferencial de energía al cuello, que consiste en la lesión producida por una flexión seguida de extensión brusca y excesiva del cuello.

 

La causa más frecuente y que todos conocemos es la producida por un accidente automovilístico, especialmente cuando se produce un golpe inesperado por detrás, ya que la musculatura está relajada y no es capaz de limitar ni controlar ese movimiento que se produce. En un primer momento tras el golpe se producirá un movimiento de la cabeza hacia delante (flexión o aceleración), seguido de un movimiento de la cabeza hacia atrás (retroflexión o extensión o desaceleración) lo que producirá la lesión.

¿Qué síntomas produce?

 

  1. Dolor muscular cervical que se puede irradiar a miembros superiores
  2. Cefalea tensional (muscular)
  3. Mareos y vértigos
  4. Parestesias en rostro o brazos
  5. Dificultad para dormir
  6. Ansiedad

¿Cómo se diagnostica?

 

El diagnóstico es fundamentalmente clínico, basándose principalmente en una correcta anamnesis y una buena exploración física, en la que se suele encontrar una contractura de la musculatura paravertebral. Sin embargo, se realizarán pruebas complementarias habitualmente, principalmente una radiografía cervical, que, aunque en la mayoría de los casos es normal y se realiza para descartar otras posibles complicaciones, ocasionalmente se podría encontrar una rectificación de la lordosis cervical fisiológica.

 

¿Cuál es su tratamiento?

 

  1. Ortesis (collarín cervical): tiene como objetivo la reducción de la movilidad cervical, así como aliviar el dolor. La tendencia actual es utilizarlo en breves periodos de tiempo, para permitir el proceso natural de curación.
  2. Tratamiento farmacológico: relajantes musculares (como benzodiacepinas) y antiinflamatorios.
  3. Terapia manual: movilizaciones cervicales, tracciones, estiramientos.
  4. Ejercicio terapéutico
  5. Electroterapia: la estimulación nerviosa transcutánea (TENS), consiste en estimular las fibras nerviosas mediante la aplicación de corrientes eléctricas suaves.

 

Consejos para prevenir el latigazo cervical

 

En los vehículos, el reposacabezas es un elemento esencial de seguridad pasiva para prevenir, en la medida de lo posible, lesiones en la columna cervical en caso de accidente de tráfico. Se debe ajustar la altura del reposacabezas para que el centro de este se encuentre a la altura de los ojos del conductor.

 

El respaldo del asiento se debe ajustar lo más vertical posible y apoyar completamente la espalda en él.

 

Si somos el conductor, debemos estar atentos al retrovisor para poder anticiparnos a un posible choque trasero y así tensar el cuerpo, que como decíamos anteriormente, nos permitirá limitar el grado de movimiento que se producirá en el cuello tras el impacto.