En otras ocasiones ya os hemos hablado de la ARTROSIS, hoy nos queremos centrar en los procesos degenerativos que afectan a la mano y los dedos.

Los síntomas principales son el dolor, y la rigidez, que conllevan una posible limitación articular. Es más frecuente en mujeres, y son la articulación trapeciometacarpiana (la base del pulgar) y las articulaciones interfalángicas de los dedos las que más sufren esa degeneración del cartílago articular, pudiéndose originar incluso deformaciones.

ARTROSIS DE LAS ARTICULACIONES INTERFALÁNGICAS DISTALES

El paciente refiere una inflamación progresiva, en un inicio dolorosa, de la articulación hasta que se forman los engrosamientos denominados como nódulos de Heberden. Pueden aparecer en un dedo o en varios, aparentemente es una deformidad con marcado componente hereditario.

ARTROSIS DE LAS ARTICULACIONES INTERFALÁNGICAS PROXIMAL (nudillos)

Es menos habitual pero se asocia a la anterior. La deformación de estas articulaciones se conoce como nódulos de Bouchard y es, generalmente, más dolorosa que la de la articulación distal habiendo una mayor destrucción del cartílago. En la fase crónica el dolor disminuye o desaparece pero persiste una limitación de la movilidad.

ARTROSIS TRAPECIOMETACARPIANA O RIZARTROSIS: ARTROSIS DEL PULGAR

Es la degeneración de la articulación que une el pulgar al carpo, suele ser bilateral. Los síntomas principales son el dolor, la rigidez y la pérdida de movilidad, que se asocia con la pérdida de fuerza con los movimientos de agarre y pinza. Estos movimientos son imprescindibles por lo que la rizartrosis puede afectar de manera considerable nuestras actividades diarias.

¿CÓMO PUEDE AYUDAR LA FISIOTERAPIA?

La fisioterapia tiene en estos pacientes tiene como principales objetivos la disminución del dolor y el mantenimiento de la movilidad articular, previniendo las deformidades que se producen en estas. En estos casos, es muy importante explicar al paciente que es la artrosis, ya que al ser una patología degenerativa no tiene cura pero la fisioterapia puede mejorar en gran medida la calidad de vida.
Además de las diferentes técnicas de fisioterapia que podemos emplear (masoterapia, movilizaciones, cinesiterapia, termoterapia…) , el ejercicio terapéutico es fundamental para una mejoría completa. En este antiguo post del blog, os explicamos alguno de los ejercicios que se pueden hacer para la mano y la muñeca.