
Uno de los síndromes más frecuentes a los que nos enfrentamos los fisioterapeutas, es el que se deriva de un período prolongado de reposo en el lecho y de inmovilización. Esto no es sorprendente, puesto que el síndrome se produce siempre que una enfermedad o una lesión provocan la pérdida de movilidad, o cuando el paciente permanece en reposo durante un período prolongado.
La base del síndrome de inmovilización es un desequilibrio de la relación normal entre el reposo y la actividad física, dos procesos biológicos que son esenciales para preservar un estado físico óptimo.
Existen tres tipos de inactividad que, por sí solas, pueden provocar el síndrome:
- Reposo prolongado en cama prescripto para el tratamiento de una enfermedad o lesión grave.
- Actividad neuromuscular restringida causada por una parálisis o enfermedad neurológica.
- Permanencia constante en una posición determinada; por ejemplo sentado o inclinado, lo que reduce de un modo eficaz la influencia de las fuerzas de la gravedad.
Las manifestaciones clínicas del síndrome de inmovilización son múltiples y reflejan el hecho de que la inactividad prolongada provoca cambios biomecánicos y fisiológicos profundos en prácticamente todos los órganos y sistemas del cuerpo. Con frecuencia, el síndrome de inmovilización conduce a un grado mayor de incapacidad que el causado por la enfermedad o lesión inicial.
A continuación enumeraremos algunas de las manifestaciones clínicas que se presentan:
- Sistema Nervioso Central: Sensibilidad alterada, reducción actividad motora
- Sistema muscular: Reducción de la fuerza y resistencia, atrofia
- Sistema esquelético: Osteoporosis, anquilosis de las articulaciones y fibrosis
- Sistema cardiovascular: aumento de la frecuencia cardíaca, flebotrombosis.
- Sistema Respiratorio: Reducción de la ventilación, trastornos del mecanismo de la tos
- Sistema digestivo: Anorexia, constipación
- Sistema endocrino y renal: litiasis renal, aumento de la diuresis
- Sistema integumentario: Atrofia de la piel, úlceras de decúbito.
Los fisioterapeutas conocemos estos cambios y complicaciones que se producen durante la inmovilidad prolongada, ya sea por una enfermedad o lesión grave, y a veces el mismo envejecimiento del paciente; y sabemos que la prevención y un tratamiento adecuado de actividad física dirigida y supervisada por un profesional de la fisioterapia es la alternativa.
El tratamiento de fisioterapia consiste en:
- Estimulación Sensorial
- Ejercicio muscular activo (isotónico e isométrico)
- Movilizaciones pasivas de articulaciones
- Posicionamiento adecuado
- Reacondicionamiento cardiovascular
- Ejercicios de fisioterapia respiratoria
Puedes ponerte en contacto con nosotros y plantearnos tus preguntas, nuestros fisioterapeutas podrán atenderte.

Colegiada nº 6055
Diplomada en fisioterapia en la Universidad central de Venezuela, Caracas