Los pacientes en estado vegetativo necesitan los cuidados especializados de un fisioterapeuta. Aunque permanezcan quietos y en reposo es fundamental cuidar su cuerpo para que no se atrofie y también para que no se produzcan escaras y heridas.
Nuestros servicios de atención fisioterapéutica pueden proporcionarle la ayuda necesaria para que su familiar o amigo en estado vegetativo se encuentre lo mejor posible.
Dependiendo de los casos, el estado vegetativo puede prolongarse durante semanas o meses y esta falta de actividad y movilidad hay que corregirla. La mejor forma es mediante ayuda fisioterapéutica. Nuestros expertos analizarán el caso y determinarán qué tipo de intervención deben realizar.
Lo habitual en estos casos es realizar movimientos de los brazos, levantándolo, doblando las articulaciones y realizado pequeños giros. Al permanecer quietos la musculatura se va perdiendo y con los ejercicios asistidos se logra mantener en un estado aceptable y se contribuye a que no disminuya la que tiene.
Los mismos ejercicios y movimientos se realizan en las piernas. En algunos casos se puede recurrir incluso a aplicar peso o bandas elásticas para fortalecer la musculatura.
La zona de la espalda y el cuello también hay que cuidarlas. En ambos casos se realizan movimientos suaves, en los que poco a poco se va aumentando la intensidad.
Es muy importante que estas acciones ser lleven a cabo con constancia. Para que el estado físico del paciente en estado vegetativo no empeore hay que establecer un calendario y programar las sesiones fisioterapéuticas.
Estas acciones se completan con masajes. Éstos tienen un efecto relajante y calmante. Eliminan las tensiones musculares que, aunque en estado de quietud, se producen y eliminan contracturas y acortamientos musculares que pueden provocar dolor. Los masajes también mantienen la flexibilidad de los músculos y los tendones facilitando la práctica de los ejercicios con el fisioterapeuta.
Además de todo esto, al realizar los ejercicios y mover el cuerpo con los masajes se lucha contra las numerosas horas de postración en la cama, donde es normal que aparezcan escaras y úlceras que hay que atajar cuando antes para que no ocasiones problemas mayores.
Colegiado nº 3.147
Fisioterapeuta y licenciado en Ciencias de la Actividad Física y el Deporte por la Universidad Europea de Madrid.
Vicedecano del Colegio de fisioterapeutas de la Comunidad de Madrid.