En pleno verano muchos tendréis la increíble suerte de disfrutar en vuestras vacaciones de un deporte tan libre como es el surf. Como todo deporte requiere preparación y técnica pues no nos podemos olvidar que sin ellas seremos más vulnerables a las lesiones y es posible que no disfrutemos de la misma manera del deporte. Siempre hay que recordar además realizar un buen calentamiento y un buen enfriamiento para una correcta recuperación posterior que nos permitirá continuar bailando con el mar y sus olas.
¿qué lesiones son las más habituales? ¿a qué regiones debemos prestar más atención?
- Por un lado pueden producirse contusiones y laceraciones a veces por contacto con otros surfistas. Sed cautos y seguid las normas.
- Una de las principales lesiones es el esguince de rodilla, principalmente del ligamento lateral interno: Causado por determinadas maniobras que pondrán en tensión las fibras del ligamento.
- También en la rodilla se podrán producir lesiones meniscales a causa de las diferentes posiciones.
- La repetición de gestos, la sobrecarga puede llevar fácilmente a tendinopatías, principalmente en el tendón rotuliano.
- En el gesto de la remada debemos prestar especial atención a tendinopatías de la región de hombro.
- Por supuesto no podían faltar los dolores en la región de la espalda en cualquiera de sus zonas.
Obviamente cualquier lesión es posible y también debemos conocer nuestro cuerpo y sus regiones frágiles. Pero parece que las rodillas principalmente y también los hombros se llevan la peor parte. Por tanto no debemos en modo alguno olvidar estas articulaciones en nuestro calentamiento y también en nuestra preparación. Un buen trabajo propioceptivo será indispensable.
¿qué podemos hacer para prevenir?
Pero especial atención también en la preparación al famoso “core”, nuestra región estabilizadora, la faja abdominal, la que nos va a ayudar poderosamente en la búsqueda de ese equilibrio tan precario que acompaña al mar y su eterno movimiento.
Y si a pesar de toda la preparación llega la lesión recuerda que el fisioterapeuta es tu gran aliado para una correcta recuperación. Pero sobre todo, es importante siempre “lanzarse al agua” con precaución, habiendo aprendido y habiéndose preparado con profesionales. La prevención siempre será la mejor terapia que pueda existir y la que nos permitirá disfrutar con la mayor seguridad.
¡Aprende bien, cuídate y verás como disfrutas!
Colegiada nº 9403
Diplomada en Fisioterapia por la Universidad Rey Juan Carlos